Hoy 5 de Octubre es el aniversario de la muerte de Steve Jobs.
«La única forma de estar realmente satisfechos es hacer lo que consideréis un trabajo genial. Y la única forma de tener un trabajo genial es amar lo que hagáis.»
(Steve Jobs, discurso en la universidad de Stanford 2005)
Siempre he tenido admiración por Steve Jobs, y cuando he descubierto su historia sorprendente y esta cita en particular se ha subido en el escalón de los personajes míticos. Es exactamente lo que siento en mi trabajo, me siento muy satisfecho por hacer el fotógrafo de boda y amo lo que hago. Lo hago con pasión.
Con el desarrollo de herramientas como el Ipod Iphone, el Ipad Steve ha revolucionado la forma de comunicar y de organizar nuestras vidas digitales. He utilizado ordenadores Mac desde mi infancia, aún recuerdo el primer modelo LC1 que llegó en casa en los años ’90. Para conectarse a Internet en aquel entonces había unos instrumentos llamados modem que permitían un intercambio de 128 Bits por segundo.
Parece que hayan pasado siglos desde entonces. Ahora que estamos en la era digital está claro que Steve tenía una visión muy clara en la cabeza: Los ordenadores son como bicicletas para nuestras mentes, nos permiten hacer las cosas más rápido y mejor (el camino tenemos que elegirlos nosotros). En mi trabajo como fotógrafo de Boda la llegada de la era digital ha supuesto una revolución. Gracias a las herramientas de edición podemos editar las fotos con un ordenador en lugar que en el cuarto oscuro. Las posibilidades creativas se han disparado con photoshop y otras herramientas podemos tener un control total sobre el resultado. Internet es otra revolución para los fotógrafos de boda. Es un medio indispensable para enseñar mostrar mis fotos a las parejas.
Steve Jobbs ha sido uno de los impulsores de esta revolución. Este año he tenido la oportunidad de impartir un Workshop de fotografía de boda en Buenos Aires, gracias a la invitación de la escuela Motivarte. El último día del curso realizamos una sesión fotográficas de pareja en el Barrio de Palermo, en un lugar llamado los Pasajes de Palermo. Y allí estaba, un mural de Steve Jobbs, junto con otro del Che Guevara y uno de JFK.
Este es mi pequeño homenaje a Steve.
